En los recogidos naturales está la máxima elegancia, y este peinado es el reflejo perfecto de ello. Un moño bajo con volumen, trabajado con ondas suaves y mechones sueltos que enmarcan delicadamente el rostro, transmite frescura sin renunciar a la sofisticación.
Ella sabe lucir como nadie este estilo: sencillo en apariencia, pero lleno de detalles que revelan armonía y buen gusto.